Recibimos de muy buena manera, el proyecto que ha emprendido el INTT, el cual denominaron, de acuerdo a la Ley de Transporte Terrestre: Escuela del Transporte, que no es otra cosa que saldar una deuda formativa para la obtención de la licencia de conducir en el país.Con la inauguración de la Escuela de Conductores para motoristas el pasado miércoles en El Vigía, estado Mérida, esperamos se marque el antes y el después de la seguridad vial en nuestro país. Ya que siempre que se ha analizado a profundidad el tema de incultura vial en nuestro territorio, el punto de llegada de esos razonamientos es el proceso de obtención del permiso para conducir,
que es poco, o en algunos casos, nada exigente, que muchos otros todavía existe manipulación y actuación de gestores, lo que hace que un alto porcentaje de los conductores de nuestro país no haya recibido educación vial en su formación escolar y tampoco en el preámbulo de obtención del carnet que le habilita como conductor.Es por eso que es importante diferenciar entre saber manejar un vehículo y en lo profundo de conducirlo de forma responsable, analizando riesgos y actuando de forma segura, esa puede significar la diferencia en el número de muertes y lesionados en este y en cualquier otro país. De hecho, hasta ahora, más del 90% de las autoescuelas de Venezuela han enseñado a manejar a miles de conductores, pero muy pocas a conducirlo de forma responsable.El proyecto de las Escuelas de Transporte, con un apéndice de escuela de conductores, está basado en patrones internacionales, ya experimentados y positivamente aprobados, donde el Estado, autoriza a personas jurídicas o instituciones educativas a formar a los conductores a través de cursos de conducción con nuevas herramientas tecnológicas, entre las que destacan los simuladores, para que posterior a la aprobación de este curso, el interesado acuda al INTT a presentar el examen correspondiente y obtener la licencia; es decir que ahora el aspirante a conductor deberá pasar por dos procesos, uno en manos de la empresa privada y otro, el de otorgamiento, en competencia del Estado; Esto debería garantizar que se ofrezca la desaparecida educación vial.
Es importante conocer que este proceso se cumplirá también para la renovación de la licencia; ya que es obvio que las condiciones físicas, de salud y hasta psicológicas de una persona, pueden cambiar en el tiempo que transcurra la licencia para vencerse.
Nos encontramos en pleno proceso de adecuación, además de la inauguración de la escuela en El Vigía, se otorgaron cerca de 20 licencias de operaciones de Escuelas de transporte en diferentes regiones del país; así que a partir de ahora Venezuela comienza un proceso que esperamos se dé a la altura del compromiso que se le ha otorgado, quedará de parte de los responsables de la escuelas el afrontarlo y enfrentarlo como es debido, garantizando más que personas que sepan agarrar un volante; meter y sacar croché, la formación de ciudadanos responsables en las vías.
CIESVIAL ASUME EL COMPROMISO EN ARAGUADesde nuestra organización Ciesvial asumimos el reto. Nuestra organización recibió la licencia de operaciones para comenzar en Aragua la primera Escuela de Transporte. Nos es grato informar a todo el colectivo que las autoridades del INTT, han tomado el Simulador de Conducción ensamblado por nuestra organización en el país, como prototipo de los que se deberán utilizar a nivel nacional; de igual manera mostramos ante la opinión pública nacional el reactímetro un dispositivo diseñado por Ciesvial para evaluar el tiempo de reacción que tiene un conductor mientras se le presenta el riesgo hasta que pisa el pedal de freno; evaluación muy importante para medir el nivel de riesgo de un conductor.
En próximas entregas estaremos dando más detalles de estas herramientas tecnológicas dedicadas a la formación de conductores, así como de la necesidad de un proceso de transformación cultural en los peatones, para así lograr un equilibrio en el escenario vial.