Asociaciones civiles luchan por promover la cultura vial
Foto: Cortesía El Universal
Desde 1994 hasta 2008 la tasa de mortalidad por choques pasó de 22,33 por cada 100 mil habitantes a 28,0. La última cifra oficial publicada es de 2008: ese año 7.714 personas fallecieron en las carreteras.
Aunque para los años recientes no hay estadísticas oficiales, la Fundación Seguros Caracas maneja cifras según las cuales más de 8 mil personas mueren al año por causa de un choque. Entre los jóvenes venezolanos de 15 y 24 años los accidentes viales son la segunda causa de muerte.
Lo alarmante de los números ha hecho que desde diferentes sectores de la sociedad civil surjan iniciativas para promover la educación vial. El Comité de Compromiso Comunitario de Industrias Hermo organizó recientemente el I Encuentro de Escuelas Promotoras de Seguridad Vial en Santa Teresa del Tuy. Allí se invitó a las comunidades e instituciones educativas a desarrollar proyectos para prevenir accidentes de tránsito.
Fundación Seguros Caracas, que apoya económicamente a organizaciones que desarrollan iniciativas de educación vial, tiene una alianza con la compañía teatral Improvisto, para realizar representaciones basadas en la improvisación y en clave de humor que retratan la situación de la seguridad vial con el fin de crear conciencia entre los jóvenes. Hasta la fecha se han hecho más de 500 presentaciones.
La misma fundación, junto a la Asociación Civil Por la Caracas Posible, están impulsando una campaña llamada «El que toma consejo llega a viejo», donde los diferentes clubes de abuelos de Caracas se instalan en zonas de alta afluencia de tránsito como la avenida México o la Francisco de Miranda, con carteles que invitan a la prudencia tanto del conductor como del peatón.
Lila Vega, coordinadora de la Red de Madres, Padres y Representantes, está al frente de la propuesta Escuelas Promotoras de Seguridad Vial. En el evento organizado por Hermo, explicó la metodología para convertir a una escuela en un espacio que hable de educación vial. La idea es que la institución educativa introduzca cambios en su entorno como rayados, señales de tránsito, reductores de velocidad y actividades de sensibilización para mejorar la seguridad de los estudiantes.
La red que dirige Vega brinda apoyo logístico para llevar a cabo estas labores. En 2005, a raíz de varios accidentes de tránsito que implicaron la muerte de seis miembros de su familia, Lilian Romero decidió fundar Asotránsito, un asociación civil que trabaja para prevenir choques en las vías y para dar apoyo a las víctimas. La ONG imparte talleres para mejorar las técnicas de manejo en Caracas y realiza ferias viales donde realizan actividades con lentes simuladores de embriaguez y un simulador de choque para que los asistentes tomen conciencia de los peligros de conducir a alta velocidad o después de ingerir alcohol.
Actualmente Romero prepara una guía ilustrativa para ayudar a los afectados y víctimas de accidentes de tránsito. «Muchas personas desconocen que se debe resguardar el área donde se produjo el choque, otras son víctimas de gestores porque ignoran los procedimientos. La guía explica que la persona afectada está en su derecho de pedir una prueba de planimetría y de alcoholemia al conductor».
Fuente: El Universal
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